La inflación hizo que cayeran las ventas por cantidades en los supermercados un 0,2 por ciento interanual, de acuerdo a un informe del INDEC.
La reducción fue de 2,1 por ciento en los autoservicios mayoristas, aunque aumentó la compra de alimentos con tarjeta de crédito.
En los autoservicios mayoristas, las ventas a precios constantes sumaron en agosto un total de 4.040,5 millones de pesos.
En el cotejo mensual, en agosto las operaciones concretadas en los supermercados estuvieron 0,9% por debajo de las de julio pasado, medidas a precios constantes.
El organismo constató que los precios relativos medidos en supermercados marcaron un aumento del 81,1% acumulado respecto a agosto de 2021, y del 7,7% en relación a julio.
En cuanto a las ventas en los grandes centros mayoristas, agostó mostró una baja del 2,1% en la comparación interanual.
Además las ventas durante el octavo mes del año cayeron un 13,9% en comparación a julio.
La financiación de compra de alimentos, que representa el 90% de las ventas de supermercados, con tarjetas de crédito se elevó un 84,3% interanual y un 58,2% en los centros mayoristas, en la misma comparación.
La mayor utilización del dinero plástico revela la falta de efectivo por la pérdida del poder adquisitivo de los consumidores, frente a la inflación que en agosto alcanzó el 7,0%, de alza en los precios minoristas.
Las ventas totales a precios corrientes abonadas con tarjeta de crédito sumaron un total de 81.530.628 millones, que representó el 36,2% de las ventas totales.
En los autoservicios, las ventas pagadas con las tarjetas de crédito sumaron $6.513.078 millones, lo que significa el 17,6% del total.
En agosto, los precios internos de los supermercados subieron un 7,7% y en los centros mayoristas un 8,4%, por encima de la inflación de ese mes.
En la comparación interanual, los precios de ambos megacentros comerciales también se ubican por encima de la inflación, y en los supermercados aumentan un 81,1% y en los mayoristas un 82,8, por encima del 78,5% de la variación de los precios minoristas.
Ambos megacentros comerciales registraron subas en la facturación a precios corrientes, teniendo en cuenta la inflación de precios, ya que los supermercados sumaron ingresos por ventas por $225.510,6 millones que representa un incremento de 80,6%, y los mayoristas facturaron por $37.060,1 millones, lo que equivale a una suba del 78,6%respecto al mismo mes del año anterior.
En los centros de compras o shopping, que concentran principalmente la ventas de vestimenta y artículos suntuarios, tuvieron un aumento del 15,9% interanual.
La facturación a precios corrientes llegó a los $57.105,3 millones que representa un incremento de 123,3%, comparado con el mismo mes del año pasado cuando esos centros todavía enfrentaban restricciones en su actividad por la pandemia.
Las ventas totales a precios corrientes en los centros de compras de la ciudad de Buenos Aires alcanzaron un total de $19.033,6 millones, un alza del 143%.
En los partidos del Gran Buenos Aires se hicieron operaciones por $16.495,6 millones, un avance del 126,8% con relación al mismo mes del año anterior.