La firma Garbarino, que arrastra una deuda de 12 mil millones de pesos, repartida entre un grupo de bancos y empresas proveedoras, finalmente consiguió nuevo dueño. Se trata del dirigente del club San Lorenzo Carlos Rosales, dueño del grupo asegurador Prof.
El Grupo Garbarino se encuentra conformado por las empresas Garbarino, Compumundo, Digital Fueguina, Tecnosur, Garbarino Viajes y Fiden. Cuenta con más de 4.300 empleados, más de 200 puntos de venta y 32 centros de distribución en diferentes provincias.
Carlos Rosales se terminó imponiendo en la puja por quedarse con Garbarino a jugadores muy relevantes , como el fondo Inverlat -manejado por un grupo de exbanqueros con pasado en Citibank y Deutsche Bank y que controla entre otras empresas a Havanna- y al grupo Covelia, del empresario Rubén Depresbiteris, vinculado al sindicalista camionero Hugo Moyano.
Rosales destacó, a través de un comunicado, el enorme desafío que implica «poner en marcha el nuevo plan de negocios y expansión de la mayor cadena de retail del mercado argentino».
El empresario prevé hacer una inversión cercana a los 2.000 millones de pesos en un período de entre 18 y 24 meses para iniciar la expansión regional de la empresa, en una primera etapa a Uruguay, Paraguay, Bolivia y Ecuador, países que no tienen una fuerte presencia de marcas de Retail.
El objetivo del nuevo dueño es utilizar el poder de la marca y de su trayectoria en este negocio para potenciar las ventas online y transformarla en una especie de tienda de puntos de entrega.
Carlos Rosales ingresó a la política de San Lorenzo hace 10 años como candidato de la lista de Carlos Di Meglio, que perdió finalmente con Carlos Abdo. Pero desde el año pasado es el protesorero del club de Boedo en la gestión que encabeza el empresario y conductor televisivo Marcelo Tinelli.
Por su parte, Carlos García seguirá como CEO de la compañía, mientras que los hermanos Daniel y Omar Garbarino dejarán la empresa.
De esta manera, Garbarino finaliza una tumultuosa etapa que la llevó a soportar la peor crisis de su historia explicada por varios factores como una fuerte caída en el consumo de electrodomésticos que se dio desde 2018, pasando por el incremento de los costos laborales y comerciales, hasta la fuerte devaluación del peso frente al dólar.