La Pandemia del Covid-19 ha roto con todos los pronósticos y ha puesto a prueba a consumidores y retailes coexistiendo en escenarios impensados meses atrás, que se ven reflejados en valores que no dejan de sorprender.
Luego del boom de consumo que se dio en el canal supermercadista durante la semana del 14 al 20 de marzo, previo a la cuarentena, con porcentuales de + 56,3% respecto a igual período del año anterior, la evolución del consumo en cuarentena muestra que el factor ingreso comienza a generar contracción, y las compras empiezan a caer semana a semana, luego del gran crecimiento anterior al período de aislamiento social, preventivo y obligatorio, que también se replicó en la primer semana de la cuarentena. Por su parte, el área Metropolitana marcó tasas de consumo con crecimientos superiores a las del interior del país en dicho período.
Como consecuencia, la caída del ingreso y la pérdida del poder adquisitivo de los consumidores están arrastrando hacia el descenso al consumo masivo esencial. Para muestra basta un botón: del 11 al 17 de abril se vendió la mitad de tickets que durante las semanas previas al comienzo del aislamiento.
Pero, cabe destacar que el ticket promedio de compra en Autoservicios y Supermercados también tuvo su crecimiento. Podemos observar que durante todo el mes de febrero y hasta la 2° semana de marzo el ticket promedio se mantuvo entre los 425 y los 450 pesos. Luego, durante la semana anterior a la cuarentena ese valor pega un salto considerable alcanzando los 616 pesos, llegando a marcar un máximo de 791 pesos en la primera semana de abril ya en pleno período de aislamiento social, preventivo y obligatorio. Luego, ese promedio descendió hacia fines de abril marcado un ticket que no superó los $ 720 en las últimas 2 semanas del mes.
