Marzo fue un mes sumamente atípico para el consumo masivo y el retail. Las ventas crecieron exponencialmente comparadas con el mismo mes de 2019, apalancadas por los rubros Almacén y Limpieza, sobre todo hasta el 20 de marzo, con el fin de abastecerse para el período de aislamiento social, preventivo y obligatorio, decretado por el Gobierno Nacional.
El mes de marzo presentó un crecimiento en el consumo del 24,8% comparado con el mismo mes del año anterior. Se observó un mayor crecimiento en la Ciudad de Buenos Aires y GBA (27,7%) comparado con el interior del país (24,1%).
Luego de conocerse los primeros casos de Coronavirus en Argentina a principios de marzo y que el Gobierno determine la suspensión de las clases a mitad del mes, el consumo se disparó exponencialmente entre el 15 y el 19 de marzo con fines de abastecimiento ante la incertidumbre de una inevitable cuarentena que finalmente llegó el día 20.
Luego del período donde las familias se abastecieron generando quiebres de stocks de diversos productos, durante la última semana de marzo las compras fueron más de reposición, generando que la tasa de crecimiento sea menor, inclusive en las provincias más afectadas.
Durante el período previo a la cuarentena, los consumidores optaron, en su gran mayoría, por stockearse en las grandes superficies de ventas como súper e hipermercados. Luego, ya abastecidos, durante la última semana del mes el consumo se trasladó a los formatos de proximidad y las compras online.
Los productos de almacén y los alimentos frescos fueron las categorías que lideraron las ventas en todos los formatos. Por el contrario, las bebidas alcohólicas fueron las más perjudicadas frente a este nuevo escenario de consumo. A su vez, el Covid-19 impulso categorías en el canal online que hasta el momento no estaban tan desarrolladas como helados, levaduras, insecticidas, chocolates, tinturas, etc.
Ya con la cuarentena decretada desde el 20 de marzo, las ventas comenzaron a disminuir, aunque siguieron siendo superiores a las de 2019. Los shoppers realizan sus compras de reposición, pero ya no se stockean tanto en unidades como lo hacían antes de la cuarentena. De todas formas, el consumo continúa incrementándose ya que la gente está en sus casas consumiendo adentro lo que antes muchas veces gastaba fuera de sus viviendas.
